Esta tarde de domingo no fue una más para una abuela de 68 años, que no vive sola, sino con su hijo y sus nietos en el tranquilo Junín.
De repente suena el teléfono y del otro lado la voz de una mujer.
hola...tía ...así comienza la charla, inmediatamente se dan cuenta que algo raro sucedía , ya que no había posibilidad de una sobrina del otro lado del tubo, y comienzan a grabar la charla que luego van a escuchar.
Habitualmente la metodología va cambiando, pero desde hace unos días escuchamos un verso muy similar, que los billetes se vencen y los tiempos se acortan y hay que cambiarlos en el banco mañana temprano.
Quizá la cuarentena potenció este tipo de delitos que han crecido en estos últimos meses de manera alarmante.
EL AUDIO DE LA GRABACIÓN DE ESTA TARDE
Hay que estar muy atentos y alertar a nuestros padres o abuelos para no ser sorprendidos por este tipo de organizaciones muy difíciles de desarticular.
La policía alerta todo el tiempo, generalmente trabajan con mucha velocidad y no dan tiempo a que puedan reaccionar y cuando quieren acordar los convencen y le entregan todos los ahorros.
Llaman a teléfonos fijos en su mayoría de las veces y lo números figuran como privados o características de otras provincias.
En fin a alertar y mantener a los abuelos con las luces encendidas, claro esta que ellos han vivido otra Mendoza, otros tiempos que seguramente añoramos todos.
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